Merece la pena conducir más de tres horas para llegar a
Viella y encontrarte con los cinco amigos que hace 26 años fundaron el club de
la Val d'Aran. Javier Bordes, J Antonio Serrano, Luis Moreu, Antonio Salillas y
Carlos Bordes.
Amigos que en tierras lejanas son un referente del espíritu
rotario. Con todos estos años de forma firme han sabido y saben, cuidar la
amistad, el club y sus actividades.
Este año han participado de forma activa en la campaña
Distrital, Toma un café, salva una vida. Han colocado 4 huchas en
establecimientos de la ciudad y después en un día de mercado. Han hecho una
aportación a la ayuda a Dana y constato que están muy cerca de toda la
información y actividades del distrito y que la distancia no es verdaderamente
un obstáculo para poder vivir y amar a Rotary desde las montañas.
Tienen claro que uno de los objetivos para este año es
crecer y rejuvenecer el club y esperan acabar al año con otros tres socios,
aunque lo quieren, les resulta difícil conseguir socias rotarias que puedan
entrar.
El ambiente, el entorno, la acogida y la compañía de todos
nos han proporcionado tanto a mi asistenta M Fernanda Calero, a Manel, como a
mí unos momentos entrañables y felices, que nunca olvidaremos.
